Etiquetas de habitaciones

¿Qué significa el ejemplo anterior?

Piense en esto:

La diferencia de precio entre una habitación doble y una individual es de -30%.

Hipótesis 1:

Las habitaciones individuales se venden mucho más rápido que las dobles. El sistema detecta esta tendencia y aumenta el precio de las habitaciones individuales un 10%. Mientras tanto, las habitaciones dobles no se venden tan bien como las individuales, por lo que el sistema reduce su precio un 10%. Suponiendo que la recomendación de precio estándar para las habitaciones dobles (sin ningún ajuste) sea de 100 euros, así es como se ajustan los precios:

• Habitaciones dobles: 100 euros - 10% = 90 euros, precio recomendado con etiqueta de rendimiento aplicada
• Habitaciones individuales: El precio estándar es un 30% inferior al de las habitaciones dobles, por lo que 70 euros + 10% de ajuste de la etiqueta de rendimiento = 77 euros, precio recomendado con la etiqueta de rendimiento aplicada

En este ejemplo, la diferencia de precio entre Habitaciones Dobles e Individuales ha pasado del -30% estándar (de 100 euros frente a 70 euros) a un -14% (de 90 euros frente a 77 euros) debido a las etiquetas de rendimiento.

Situación 2:

Las habitaciones dobles se reservan más que las individuales. El sistema sugiere aumentar el precio de las habitaciones dobles en un 10%. Por el contrario, las habitaciones individuales tienen un rendimiento inferior, por lo que su precio disminuye un -10%. De nuevo, partiendo de un precio estándar de 100 euros para las Habitaciones Dobles, éste es el resultado:

• Habitaciones Dobles: 100 euros + 10% = 110 euros, precio recomendado con etiqueta de rendimiento aplicada
• Habitaciones Individuales: El precio estándar es un 30% inferior al de las Habitaciones Dobles, por lo que 70 euros - 10% de ajuste de la etiqueta de rendimiento = 63 euros, precio recomendado con la etiqueta de rendimiento aplicada

En este caso, la diferencia de precio entre habitaciones dobles e individuales ha pasado de -30% (de 100 euros a 70 euros) a -43% (de 110 euros a 63 euros) debido a las etiquetas de rendimiento.

Configuración de etiquetas de rendimiento

No es necesario aplicar etiquetas de rendimiento a todas las categorías de habitaciones. Puede optar por aplicarlas sólo a categorías con demanda fluctuante en las que desee una mayor flexibilidad de precios. Aunque no hay ningún problema en aplicar una etiqueta de rendimiento a todas las categorías de habitaciones, la clave está en agrupar habitaciones dentro de un rango de precios similar que puedan atraer a tipos de clientes similares. Por ejemplo, probablemente no tenga sentido agrupar habitaciones estándar y suites si hay una diferencia de precio significativa entre ellas, ya que las tendencias de demanda de una categoría pueden no aplicarse a la otra.

Estos ajustes determinan el rango dentro del cual se permiten los ajustes de precio. Por ejemplo, si el ajuste mínimo es '-10%' y el ajuste máximo es '+10%', entonces, partiendo de un precio estándar de $100, el precio ajustado podría oscilar entre $90 y $110.

NOTA: Si una habitación ya tiene un precio bajo debido a la derivación del precio estándar, puede que prefiera no establecer un ajuste mínimo bajo y, en su lugar, permitir aumentos si hay mucha demanda. Tenga en cuenta que los ajustes pueden ser asimétricos.

También es esencial tener en cuenta la derivación de precios entre las distintas categorías de habitaciones. A la hora de establecer el margen máximo de ajuste, es posible que desee anticiparse y evitar situaciones en las que, por ejemplo, las habitaciones individuales puedan llegar a ser más caras que las dobles. Si le preocupa que los precios se solapen, recuerde que si una categoría disminuye un 10% y otra aumenta un 10%, la diferencia de precio inicial debe ser de al menos un 25% para evitar el solapamiento, es fácil de ver con este ejemplo:

• Supongamos que la recomendación de precio estándar de la habitación A es de 100 euros, y que la habitación B tiene una derivación de +25%, lo que hace que su precio recomendado sea de 125 euros.

Si aplicamos un ajuste de +10% de la etiqueta de rendimiento a la habitación A y un ajuste de -10% a la habitación B, los precios serían:

• Habitación A: 100 € + 10% = €110
• Habitación B: 125 € - 10% = €112,50

Si la diferencia de precio fuera inferior al 25%, o si los ajustes superaran el ±10%, la habitación menos cara (habitación A) podría acabar teniendo un precio superior a la habitación más cara (habitación B), en función de la demanda. Es fundamental tener esto en cuenta al aplicar las etiquetas de rendimiento para evitar solapamientos de precios involuntarios.

• Agresividad

La agresividad determina la rapidez con la que los ajustes se mueven hacia los límites máximos o mínimos. Seleccionar una agresividad Alta significa que los precios se ajustarán rápidamente al máximo o al mínimo si hay un desequilibrio significativo de reservas entre los tipos de habitación. Por el contrario, si se selecciona Baja, los precios se ajustarán gradualmente en función de los mismos factores.

CASOS DE USO: APLICACIÓN DE VARIAS ETIQUETAS DE RENDIMIENTO AL MISMO TIPO DE HABITACIÓN:

Cuando se aplican varias etiquetas de rendimiento a un mismo tipo de habitación, las etiquetas se acumulan, lo que aumenta el ajuste global realizado por las etiquetas de rendimiento.

Caso 1: Dividir las habitaciones por varias calidades

Por ejemplo, considere los tipos de habitación A, B, C y D:

• Los tipos de habitación A y B tienen una ocupación máxima de 2 personas.
• Los tipos de habitación C y D tienen una ocupación máxima de 4-6 personas.
• Las habitaciones A y C están equipadas con aire acondicionado, mientras que las habitaciones B y D no.

En este caso, puede crear las cuatro etiquetas siguientes:

• Habitación Doble
• Habitación familiar
• Con aire acondicionado
• Sin aire acondicionado

A continuación, puede asignar etiquetas de la siguiente manera: A (Habitación doble y con aire acondicionado), B (Habitación doble y sin aire acondicionado), C (Habitación familiar y con aire acondicionado) y D (Habitación familiar y sin aire acondicionado).

Caso 2: Habitaciones con diferentes vistas dentro de las categorías estándar

Esto le permite diferenciar aún más, por ejemplo, etiquetando tipos de habitación con vistas específicas además de sus categorías habituales.

Caso 3: Amplificación de ajustes para habitaciones con alta derivación

Para habitaciones con una derivación muy alta del tipo de habitación de referencia (por ejemplo, un dormitorio privatizado en un hostal frente a una cama en un dormitorio compartido), puede replicar las etiquetas de rendimiento para crear ajustes mayores. Dado que el ajuste mínimo/máximo estándar para las etiquetas de rendimiento es de ±25%, esta estrategia es útil para habitaciones con diferencias de precio sustanciales.

Caso 4: Gestión de múltiples propiedades dentro de una misma cuenta

Cuando se configura una cuenta RoomPriceGenie (RPG) para varias propiedades, la superposición de etiquetas de rendimiento puede ayudar a optimizar los precios en diferentes ubicaciones.

El siguiente ejemplo muestra una etiqueta de rendimiento combinada, «Prueba», aplicada a diferentes tipos de habitaciones. Seleccionando fechas individuales en el calendario, puede observar los efectos de la estrategia de precios.